La celebración a la muerte y a la vida Círculos de Nada
La celebración a la muerte y a la vida
Circulos de Nada
2 de Noviembre (2013)
Dentro del disco viene un mensaje escrito por la banda, agradeciéndonos ser parte de esta ofrenda que nos adentra a su altar, el cual han desarrollado a lo largo de 11 temas, cabe destacar que incluye un papel picado listo para colgarse junto a las velas y que los espíritus nos acompañen en este plano terrenal.
La ofrenda comienza con «El mal», suena a que estamos apunto de adentrarnos a un ritual, uno que toca las raíces de la tierra, hablando particularmente de nuestro suelo, no se cuanto una banda se tarde en elegir el orden de los temas pero a veces simplemente hacen un trabajo formidable en la forma en que fluyen, como en este caso, solo nos falta percibir los aromas, pues el camino se empieza a iluminar para que las almas encuentren su hogar.
No hay forma de describir completamente el sonido de la banda, a lo largo de los años nos tienen acostumbrados a mezclas de folclor mexicano con tintes de todos sabores, estamos ante uno de sus trabajos mas sólidos «al lado del diablo» y «esa sombra» son temas que nos hacen mover el
esqueleto.
La letra de «esa sombra» me parece una de las mejores que eh escuchado.
En «Cada mañana» se presenta un invitado especial Tony Hernández (El Gran Silencio) que se hace escuchar en un inicio a través de su ejecución en la tornamesa para después darse cabida en el tema con su voz, es una grata sorpresa, aquí se hace sentir la escencia de la banda porque a pesar de que estos muchachos sean como diría Rockdrigo Gonzalez de Tiempos de híbridos, si tienen un sonido que a lo largo de sus 13 años, contando desde el lanzamiento de su primero disco, han ido desarrollando.
Llega el turno de «invocandote» un tema instrumental que nos ayuda a plantar el camino de flores de cempasúchil, también de cierta forma se siente como un interludio para la segunda parte del disco.
«La cajita» bien podría ser una de las piezas de su altar, de esos objetos que hay que poner que le gustan a quien se le esta haciendo la ofrenda, llega «dos de noviembre» tema que da nombre al disco y al concepto de este álbum, aquí es donde se hace notar uno de los momentos mas fuertes del disco musicalmente hablando, la guitarra de Alan Alanis y el trabajo del bajista de la banda Jalil Rendon sobresalen, aquí es cuando el folclor choca con una montaña y crea una nube, aquí es donde no se describe la música, aquí es donde solo se vive.
Al final del disco nos quedan cuatro temas «la fiesta» «catrina «soledad» y «la peregrinación de los cirios». Los cuales terminan de cerrar el disco de una forma solida.
En conclusión es un disco que logra acercarnos a la música tradicional de nuestro país, son canciones que logran hacernos sentir orgullosos de las raíces musicales, sin sermonearnos, únicamente atraves de su sonido, atrayendo nuestras raices, citando nuevamente a Rockdrigo Gonzales «son campesinos siderales» a diferencia del final de la canción de Rockdrigo el universo sonico de círculos de nada mantiene su identidad y su libertad, dando como resultado final un tributo a una de las fiestas mas arraigadas y profundas de nuestro país.
FOTOS POR NORMA RANGEL
ESCRITO POR MIKE VOLTA