Segunda Jornada FIMPRO 2018
Este segundo día de FIMPRO 2018 exploramos, a lo largo de las conferencias, el
nuevo ecosistema sonoro al que deben enfrentarse los artistas: un universo donde
las agregadoras y las marcas juegan un papel primordial en la exposición de los
músicos. Además de esto, la delegación profesional de Canadá ofreció una
ilustrativa charla sobre el estado actual de su industria y los factores que les han
llevado hasta ahí.
Los encuentros periodísticos exploraron el tema de los aportes femeninos, mientras
que Altafonte celebró su encuentro de Desarrollo Internacional Independiente. Los
talleres y networkings siguieron su marcha y las speed meetings abarrotaron
prácticamente todos los rincones del Conjunto de Artes Escénicas.
Da Pawn y Telmary & HabanaSana llenaron de energía la Sala 2 con su rock
melódico y su fusión hiphopera cubana; más tarde y bajo un sol poderoso, Yangos
y Sr. Mandril amenizaron el cierre de la primera tanda de actividades, antes de que
todos los asistentes se retiraran para alistar su ánimo y emperifollarse para la tanda
musical de la noche.
¡Nos vemos mañana para la recta final!
Distribución digital en el nuevo ecosistema sonoro
El segundo día de la cuarta edición de este encuentro por la música dio inicio con
la conferencia “Distribución digital en el nuevo ecosistema sonoro”, donde se contó
con la participación de cuatro agregadoras digitales representadas por Ariel Etbul,
de Ditto Music; Inma Grass, de Altafonte; Mario Sánchez, de CD Baby y Claudia
Ochoa, de The Orchard.
Inició la charla explicando la función de las agregadoras o distribuidoras digitales de
música y cómo son indispensables para que la música pueda estar en las tiendas.
Estas se encargan de mediar el acceso, a las diferentes plataformas y mercados.
Les ayuda a los artistas o sellos a subir su contenido y hacerlo disponible en las
tiendas y plataformas. Adicional a que ayuda al músico a que puede mirar las
estadísticas e ingresos que se generen en las diferentes plataformas.
Claudia Ochoa, de The Orchard, mencionó que, para ellos, como empresa, es
fundamental tener una buena comunicación con el artista, aunque trabajan con
disqueras grandes, generalmente. Irma Grass, de Altafonte, inició su intervención
explicando que el paradigma de la música ha cambiado completamente, pues hace
unos años era necesario tener muchísimo dinero para grabar un disco. Hoy en día
eso se ha facilitado, ha cambiado la forma en la que se da a conocer esta música.
Antes se dependía de la radio, si esta no te programaba, no llegabas al público,
ahora gracias al nuevo entorno, las redes sociales, eso cambió y es posible que los
artistas tengan su propia audiencia, con la que establecen un diálogo directo.
Altafonte trabaja mucho con disqueras y también con artistas, pero es importante
que, aunque lo maneje una disquera, el artista sepa y trabaje en lo que quiere
comunicar. Cuando el artista tiene esto claro es cuando necesita de una agregadora
que pueda ayudarlos a dar ese paso más. Por su parte, Ariel Etbul, de Ditto, enfatizó
que un artista independiente debe ser el director general de su proyecto.
Lo que ha cambiado de unos años para acá es que hay más opciones para el artista
independiente. Las ventajas que te ofrece una distribuidora es que puedes llegar a
lugares que antes solo podías imaginar como disquera, que puedas tener más
artistas, que puedas tener oportunidades de crecimiento digital en otros territorios.
Las distribuidoras, aunque tienen modelo de negocios diferentes, te ayudan a llegar
a lugares donde no estás.
Al respecto de las nuevas tendencias de consumo, Etbul señaló: “lo que cambia es
que hay que entender como tu fan consume música, la gente ya no consume
álbumes, consume tracks, las generaciones actuales consumen tracks. Cada
viernes salen miles de novedades y hay que competir para estar visible todo el
tiempo posible”. Opinión distinta a la de Irma Grass, pues ella asegura que “el disco
todavía tiene su vida, hay otros tipos de audiencia y otro tipo de músicos que todavía
pueden apreciar el trabajo que contiene un disco, eso todavía sigue teniendo
sentido, aunque la tendencia sea tracks. Además, no todos los artistas son
mainstream, ni necesariamente lo quieren ser, muchos se quieren dirigir a su nicho,
no a la masa y puedes funcionar en el mundo de la música”.
Sumándose a la discusión, Mario Sánchez, de CD Baby, aclaró que “los músicos
deben tener un concepto completo de la obra, ya que muchos piensan que hoy en
día no hay que hacer un disco; de hecho, alguna vez escuché a un periodista decir
que los rockeros deberían aprender de los hip-hoperos que sacan un track nuevo
cada semana… pero las canciones no son videoblogs. Eso depende del artista”.
Mujeres: las periodistas que inspiran
Durante la segunda jornada de FIMPRO, las mesas de trabajo periodístico siguieron
adelante con el tema “La mirada femenina”, contando con la presencia de la
periodista y programadora radiofónica colombiana Luisa Piñeros, así como con la
participación de Natalia Cano y Liliana Estrada, ambas de la Ciudad de México. Tras
una breve semblanza profesional, la charla se enfocó en desgranar aquellas
situaciones que, como mujeres, han tenido que sortear a lo largo de sus respectivas
trayectorias.
El lugar común nos dice que, muy seguramente, la plática comenzaría a rondar los
archisabidos temas de siempre: acoso, condiciones desfavorables en comparación
con las de sus colegas hombres, disparidad de oportunidades para crecer. Sin
embargo, las tres panelistas coincidieron en que, al menos en el ámbito del
periodismo musical, las condiciones han cambiado mucho: hoy día, compartió
Piñeros, “competir con los hombres no tiene cabida.”
No se trata de que el espacio ya haya sido ‘conquistado’ por las mujeres. Mucho
menos implica que las mujeres que en él se desarrollan hayan tirado la toalla.
Significa que, poco a poco, la equidad se ha convertido en el motor, pues, como
señaló Natalia Cano, “el que tiene talento puede encontrar un lugar” y, aún más allá,
Liliana Estrada apuntó que la competencia no tiene sentido, pues “el trabajo en
equipo es lo que puede fortalecer a la industria musical y al periodismo”.
A través de sus experiencias profesionales, los asistentes, estudiantes en su
mayoría, pudieron caer en cuenta de que en el ámbito para el que se están
formando goza de unas condiciones que no todos los campos tienen: la
construcción de una dinámica de equidad que no tenga que ampararse en las
llamadas “cuotas de género” u otras formas para promover la igualdad.
Al abrir las preguntas al público, un cuestionamiento invitó a una reflexión aún más
profunda: ¿en qué consiste y qué aporta de diferente la mirada femenina dentro del
periodismo musical? El monólogo se convirtió en abierto diálogo del que se
obtuvieron dos ideas a todas luces atinadas: por un lado, Liliana Estrada subrayó
que, en buena medida, las mujeres tienen un mayor atrevimiento que los hombres
y eso les da una perspectiva mucho más arriesgada. Para Luisa Piñeros, el aporte
es un poco más sutil pero igual de poderoso: las mujeres periodistas, además de
informar, “inspiran al público. Esa es mi palabra de hoy: inspirar”.
Investigación y cabildeo, los ingredientes de la industria canadiense
Para nadie es un secreto que el mercado musical de Canadá ha tenido un
crecimiento enorme en los últimos años. Pero, ¿cómo lo han logrado? Responder a
esta interrogante fue el objetivo de la conferencia “Industria musical en Canadá”,
celebrada durante nuestra segunda jornada de trabajo y en la que participaron Neil
Dixon, de Canadian Music Week; Derek Andrews, de Mundial Montreal; Bruce
Bradley, de Slammin Media; Jodie Ferneyhough, de CCS Right Management y Jeff
Beaulieu, de Rock N Rights.
Cada uno, desde sus respetivas áreas de trabajo, han formado parte de la
consolidación de la industria musical de Canadá. Y aunque todos emprenden tareas
distintas para diversas organizaciones, una idea que tienen en común es que el
fortalecimiento de una industria, así como el crecimiento de los artistas dentro de
ella, depende de una sola cosa: investigación. Esa ha sido la clave. Por ejemplo,
Neil Dixon, dio a conocer este año la primera edición de un completísimo directorio
de todos los agentes involucrados en el mercado canadiense: sellos, agencias,
asociaciones, etcétera. Y para ello, fue necesario poner en marcha una amplia
investigación de mercado. Igual sucede con la organización de la Canadian Music
Week que, por cierto, este año tuvo como foco a México.
Una opinión similar es la de Derek Andrews, de Mundial Montreal, el evento anual
dedicado al world music en Canadá. Sin investigación, por ejemplo, no habrían
caído en la cuenta de que el mercado canadiense “tiene oídos muy abiertos. Nos
distinguimos de Estados Unidos porque ellos son una olla de fusión y nosotros un
mosaico. En Canadá, el público espera que los artistas conserven su cultura y no
que ésta sea asimilada.”
Al detenerse en las relaciones entre la industria canadiense y la mexicana, Bruce
señaló que Slammin Media ya tiene una oficina en México, dirigida por Héctor Flores
en Toluca, mientras que Jeff Beaulieu apuntó que está interesado en “llevar grandes
historias de México a Canadá. Y para llegar a eso -a ser una gran historia en la
música- las propuestas deben ser auténticas. La música tiene algo que toca fibras
cuando es auténtica.” Por supuesto, la tensa relación entre México y EEUU fue un
tema que no escapó a los ponentes, quienes aprovecharon para desmarcarse de
las opiniones del mandatario estadounidense, a las que calificaron de “sumamente
Pero no sólo la investigación ha sido clave en el desarrollo de la industria musical
de Canadá: el cabildeo y las negociaciones que sostienen con el gobierno también
ha sido un factor clave, especialmente en la gestión de Trudeau. En este punto,
Andrews compartió con el público que dicho cabildeo tenía la intención de “proteger
a las industrias creativas de Canadá de la influencia de la industria de EEUU”,
además de que buscaba incentivar la participación y financiamiento público. Sin salir
del tema, Jodie Ferneyhough sentenció: “un consejo que puedo darles es la
creación de una especie de ‘oficina de exportaciones musicales’, una asociación
que promueva la música mexicana fuera de México”.
Marcas: más allá del patrocinio
Cada vez más, las marcas se integran de manera compleja e intensa a los ámbitos
culturales. Contrario a lo que muchos piensan no solo ‘compran’ los nombres de los
escenarios o foros, mandan a imprimir sus logos en los programas y montan sus
stands. Las marcas, hoy más que nunca, aportan conceptos y son parte integral de
las experiencias culturales. Esa es la idea general sobre la que se desarrolló la
conferencia “Comunicando con música”, en la que participaron Rodrigo Casarín, de
Bud Light; Hugo Díaz, de Grupo Sicario; Andrés Varnava, de Lollapalooza Chile y
Alejandro Tavares, de Cosquin Rock México.
Para Rodrigo Casarín representante de Bud Light, las marcas pueden relacionarse
con el ecosistema musical desde tres diferentes ámbitos: contenido, experiencia y
creación. Por este motivo, la marca de cerveza género la Plataforma Bud Light Ware
House, que incluye cuatro streamings a la semana con más de 200 shows, la
producción de un programa de radio que se distribuye en EXA y D99, el patrocinio
de festivales nacionales e internacionales, fiestas itinerantes por el país y trabajo
con los artistas para ayudarlos a crear y a descubrir nuevos talentos.
Bud Light generó un ecosistema, donde seleccionan cuatro artistas, producen sus
videos musicales, suenan en su radio, tocan en sus fiestas, los meten en sus
festivales y así están impulsando a nuevo talento.
Andrés Varnava, del festival Lollapalooza Chile, comentó la importancia de
sensibilizar a las marcas: “No queremos que las marcas pongan su logo, ya la gente
sabe perfectamente que está tomando tal bebida, tal cerveza, no es necesario
ponerle la marca encima, sino que tanto festivales y marcas podemos crear en
conjunto arte, crear experiencias”. Mientras que Alejandro Tavares, del Cosquin
Rock México, dijo que los mercados musicales como la FIMPRO nos han otorgado
afinidad musical con otros países latinoamericanos y nos permiten realizar
intercambios culturales para buscar no solo el sponsoreo de las marcas, sino más
allá, un crecimiento que puede incluso llegar hasta el desarrollo turístico.
Altafonte, innovación e impulso de la música en español
Durante el segundo día de FIMPRO 2018 sucedió el encuentro Altafonte: Desarrollo
Internacional Independiente en España y América Latina, un espacio para desatacar
la importancia de potencializar el consumo y alcance de la música en español, así
como las herramientas y estrategias que Altafonte está gestando para impulsar a
este sector en el mapa internacional.
Más que un agregador digital de música, Altafonte da asesoramiento a los músicos
y sellos independientes que, gracias a estrategias globales, sincronización,
campañas de marketing y demás acciones, logran despuntar en el mercado.
Inma Grass, directora de comunicación en Altafonte, explica como con 500 millones
de personas que hablan español, esta agregadora se centra en el mercado de la
música que habla este idioma, teniendo un gran objetivo: crear un mercado de
consumo de estos contenidos, tal como sucede con la música en inglés.
¿Cómo lograr este objetivo? La pieza clave es el engagement, una conexión a
través de componente emocional y así entonces “enganchar a la audiencia” de
manera profesional. La relevancia de establecer este tipo de puente entre el artista
y el consumidor radica en la situación actual de la industria musical, que se
encuentra en constante movimiento y los proyectos sonoros deben continuar
trabajando dándole contenido a sus fervientes escuchas. Es justo en este rubro en
donde Altafonte también asesora a sus asociados y así alcanza la
internacionalización de su música.
APP Altafonte: tu audiencia mundial en tus manos
Inma Grass y Mario Pato, Director Internacional de Altafonte, anunciaron el
lanzamiento mundial de su aplicación en la que el usuario podrá conocer detalles
de quiénes son los que escuchan su música, dónde se concentran y qué es lo que
prefieren, todo esto desde su móvil.
Tomando la tecnología como herramienta para el fortalecimiento de la música y con
un profundo estudio del funcionamiento de plataformas musicales, esta APP está
diseñada para cubrir las necesidades de músicos y sellos al incluir información de
marketing digital, gráficos de consumo de tu música e informes claros y
transparentes de lo que ocurre con lo que suena de tu proyecto en el mundo.