La excavación: la huella que queda al morir/ cine
Norma Rangel. 17 febrero 2020, Monterrey N.L.- Recientemente llegó a la plataforma de Netflix La excavación (The Dig) film basado en la novela de John Preston dirigida por Simón Stone quien recrea de manera dramática la historia de el tesoro de Sutton Hoo lugar situado en Suffolk (Reino Unido) en el año 1939.
Edith Pretty (Carey Mulligan) posee un amor a la arqueología heredado de su padre, junto a su marido compraron un extenso territorio en el cual se encontraban unos montículos, bajo la sospecha que en ellos había algo enterrado, con un hijo pequeño (Archie Bernes) y tras la muerte de su marido, Pretty decide contratar al excavador Basil Brown (Ralph Fiennes), después de llegar a un arreglo económico inició la excavación. En los primeros tumultos de tierra salió a la luz madera muy antigua, esto les daba ánimos para continuar con el trabajo, pero tiene un terrible accidente, queda bajo la tierra que había sido removida, tras ser rescatado, lejos de retirarse este infortunio le crea una revelación, es momento de hacer caso a las corazonadas de Pretty, y mover tierra en el montículo más alto, unos días de después encontraron lo que parecían engranes, así es como sale a la luz un barco de aproximadamente 30 metros de largo. Tras enterarse la comunidad del hallazgo y llegar hasta los oídos del Museo Británico, por orden del Ministerio de obras todo el control de la excavación debe pasar al arqueólogo Charles Phillips (Ken Stott) quien se adueña del descubrimiento, Pretty y el señor Brow son conscientes de ello, pero se resisten a dejar su labor, comenzando a trabajar en colaboración descubren que el misterioso barco, contiene una cámara funeraria donde encontraron el tesoro de Shuton Hoo, esto mientras la salud de Pretty empeora, así como la segunda guerra mundial inicia.
El amor por encontrar la línea que une a los antepasados con el presente, es lo que nos lleva a conectar con esta película basada en hechos reales, que intenta dar el merecido reconocimiento a quienes descubrieron y dieron seguimiento al hallazgo, siendo uno de los más importantes de la historia del Reino Unido y lo logra, pues demuestra que tanto sus descubridores como quienes colocaron el barco nunca murieron, pues la huella que dejaron, los mantiene vivos.